VISTO EN FRESQUI
El chocolate contiene los componentes dietéticos necesarios para elevar el ánimo, hacernos sonreír, favorece la concentración y la energía física. Además de tener propiedades medicinales naturales.
Las últimas investigaciones apuntan a que el chocolate actúa a través de las mismas vías neuroquímicas que se utilizan en los antidepresivos y ansiolíticos, es decir, de la dopamina, de la noradrenalina y de la serotonina, sustancias de las que dependen el estado de ánimo. Además, su cafeína resulta un buen estimulante para los deportistas y ante esfuerzos intelectuales, resistencia a la fatiga. Con un alto valor nutritivo, pues contiene magnesio, que ayuda a mantener la salud de los músculos, así como a la formación de célula nuevas y resulta un eficaz calmante para la ansiedad.
También se ha demostrado que tomar cacao de forma habitual disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares, cáncer o enfermedades de tipo autoinmune y degenerativo. A lo que se añade que, debido a la cantidad de antioxidantes que contiene, retrasa el envejecimiento. Por sus componentes en zinc y hierro previene la anemia.
Y lo que es mejor, tampoco engorda demasiado, puesto que cada 100 gramos contienen 500 calorías, que es bastante pero bastante menos de los que contiene una hamburguesa por ejemplo. Aquí teneis una idea de qué engorda más y menos:
200 calorías en imágenes
Me gusta el optimismo, así que ya tengo excusa barata para duplicar mi dosis de chocolate diaria (nocturna más bien) de Milka Luffle (ese como con burbujas por dentro que hacen catapultando ardillas según el anuncio) y las INCREÍBLES bolitas surtidas increíblemente buenas de Lindor (no me pagan, es que están buenísimas y además son bombones baratísimos).
¿Alguna recomendación de chocolatinas?