Los hombres buscan orgullo, las mujeres cariño.
Te ofenden, te comparan y no te valoran. Te cabreas, dices cosas y te vuelves un arisco porque evidentemente no estás para ser cariñoso. Así comienzan casi todos los problemas.
1. Escucha a tu novia
Chicas y chicos tenemos distintos gustos, a muchas les suele gustar hablar de moda y cosas que a muchos de nosotros nos parecen ridículas igual que a muchos les gusta hablar de fútbol y de cosas que objetivamente no son tan importantes.
Cuesta poco fingir que esos temas te interesan y a cambio harás a tu novia muy feliz, porque creerá que su novio «no es como los demás chicos» y sabe escuchar…
2. Se o al menos simula ser interesante
– Evita bromas fáciles del estilo «he visto una morena» (desde un barco, un pez).
– No estés todo el día hablando de futbol si no le gusta el futbol, o de trabajo o de cualquier otra cosa que no sea de interés común.
– Hablar de uno mismo demasiado a menudo resulta bastante insoportable para los demás. Decir continuamente lo inteligente que eres, lo musculoso que eres, lo bien que haces ganchillo o lo bien que haces tu trabajo no les importa a los demás aunque te miren con interés… A tu novia tampoco aunque tenga más tendencia a creerse lo que le cuentes.
– Evita criticar o establecer juicios de valor básandote únicamente en opiniones subjetivas: no deberías decir cosas como «que mal gusto tienes» (porque le guste un artista que tu odies) o decir X o Y es más listo o más guapo que X o Y, ya que en realidad son cosas que no pueden demostrarse de manera objetiva y además pueden molestar a los que salgan peor parados en las comparaciones.
– Si no tienes demasiado en la cabeza siempre puedes disimular intentando leer un poco historias interesantes o al menos intentando evitar hablar de determinadas cosas.
3. Aprecia a sus amigos y familia
Intenta ver el lado bueno a sus amigos o tus suegros porque probablemente lo tengan, en vez de intentar encontrar sus peores defectos. Si realmente tus suegros son insoportables o se mete demasiado en la vida de su hija simplemente intenta evitar relacionarte mucho con ellos, pero sin que tu novia lo note porque siempre intentará defenderlos y tienes todas las de perder.
Hay casos extremos (por ejemplo una amiga ha tenido que dejar a su novio hace poco por culpa de la dictadora que tenía por suegra y el calzonazos que tenía por pareja) pero en general se puede sobrellevar cualquier familia política, asi que inténtalo al menos y no te cierres a ellos en banda.
Son sus padres, son sus amigos, y aunque sean unos capullos ella les quiere, así que intenta apreciarlos tú o finge por lo menos que te importan evitando criticarles delante de ella.
4. Haz sus amigos tus amigos.
Intenta convertir sus amigos en tus amigos.
Si las amigas de tu novia te detestan déja ya a tu chica, empieza de nuevo y no pierdas más el tiempo porque tu novia te terminará dejando. 100% demostrado a lo largo de la historia: no hay manera de luchar contra la nfluencia de sus amigas.
Hay una opción B: evitar que ella tenga cualquier contacto con sus antiguas amigas; pero eso solo podrás conseguirlo si es una descerebrada o una egoísta sin sentimientos, así que si permite que cierres en banda todas sus relaciones anteriores deberías cortar igualmente porque tu novia no merece la pena, de hecho es detestable aunque aún no te hayas dado cuenta.
5. Se un «hombre».
Aunque odian al machista, algunos detalles siguen siendo agradables (a no ser que tu novia lleve camisas de leñador y se afeite una vez a la semana).
Deja pasar a las mujeres primero, cede los mejores asientos a ellas, abre su puerta del coche, sujeta tú el paraguas, camina tú por el lado más cercano a la calzada si llueve, no llores como una niña ante la más mínima contradicción, lleva las bolsas de su compra, hazle sentirse protegida, etc.
6. Se delicado en el sexo
La teoría de un amigo, según la cual ser eyaculador precoz es un «chollo» porque así te apañas en dos minutos y te cansas menos, es un poco egoísta y a la larga no suele divertir mucho a tu pareja.
Si haces algo, hazlo bien; no seas un egoísta ni obligues a nadie a nada, digamos que ellas prefieren «9 semanas y media» o «Ghost» a películas como «Semental, querido Watson«, «fue a buscar trabajo y le comieron lo de abajo» o «En boca cerrada no entran moscas pero sí pollas como roscas«
7. Sorprende y se detallista:
Aunque te diga que no necesita nada un regalo sorpresa, un desayuno en la cama «porque sí», un viaje improvisado, flores de vez en cuando, una nota de amor, etc le encantarán.
8. Sé limpio y cuida tu imagen.
Las guarrerías son muy graciosas pero posiblemente a ella no le divierten tanto, tampoco le parece sexy probablemente el olor a cobaya ni tu entrecejo.
No se trata de que te conviertas en un gilipollas metrosexual vigoréxico, esclavo de un espejo antes que de ella, pero sí ser respetuoso a través de la imagen. Siempre hay un punto medio y debes ser diferente a esos que salían en «En busca del Fuego».
10. Respeto y educación
Que no se note que miras a otras chicas porque no entenderá que es lo normal, ni hagas determinados comentarios delante de ella, no cuentes intimidades, etc.
Aunque discutas, controla lo que dices y ponte límites, tampoco la pongas en evidencia en público.
11. No seas un calzonazos, la versión ennoviada del pagafantas.
Si una chica sabe que te tiene totalmente controlado perderá el interés por tí, así que un punto rebelde alguna vez no viene mal.
Ceder a todas sus exigencias y carecer completamente de carácter es la mejor manera de convertir a una novia en amiga (y sin derecho a roce). Además, muchas intentarán cambiarte y cada paso que des será muy difícil de recuperar.
12. El amor no es decir «te quiero mucho«, es demostrarlo.
Ayuda en casa, hazle sentir bien, etc. Olvida lo que te diga y fíjate en lo que de verdad te hace sentir, y viceversa. Decir por ejemplo «no vuelvas a ver a tus amigos» no es amor, es control y desprecio por tus intereses; así que aplícate el cuento.
13. Recapacita.
Hagas lo que hagas, siempre habrá algo que te echarán en cara, siempre habrá alguien que les parecerá más atento y mejor y, en general, nada de lo que hagas terminará mereciendo la pena. No pierdas nunca tu espacio porque lo terminarás echando de menos ¿Realmente necesitas a «esa» pareja?
*NOTA: Casi todos los consejos son aplicables a ellas, pero como yo soy un chico me he centrado en los hombres.