1. Supervivencia
El pez que más aguanta sin comer es el salmon (100 días), aunque hay animales mucho más duros. En 1850 y ante las sospechas del personal se descubrió al sumergirlo en agua que un caracol del desierto que llevaba expuesto en el museo británico 4 años estaba vivo; sin embargo la campeona en supervivencia es la tortuga, que puede aguantar más de 500 días sin comer absolutamente nada (ahora me explico porqué dos tortugas que se me perdieron por el jardín sobreviven sin que yo las dé nada de comer).
De todas formas y aunque sobrevivan más tiempo que el hombre la tortuga verde por ejemplo pone 1800 huevos de los que unos 1400 no se abren, unos 370 son devorados y de los 30 restantes solo 3 crías llegarán a adultas.
2. Sentimientos
Tras la estela erroneamente cuadriculada que dibujó el maldito Descartes (el tonto engreído que iba de superpensador y que aparte de su «pienso, luego existo» decía cosas como que «los animales son máquinas animadas») se dice que los animales no sienten tristeza, pero existen múltiples ejemplos que demuestran que sí «sienten» algo parecido aunque no se reproduzca de la misma manera:
– un chimpance llamado Flint se dejó morir tras la muerte de su madre, buscando además el mismo lugar en el que la mona había muerto;
– cuando un elefante está enfermo los demás le ayudan a continuar en pie pero si al final fallece todos se sitúan en circulo alrededor de él durante un buen rato como en un pequeño velatorio;
– las mascotas dejan de jugar cuando son abandonadas, en algunos aeropuertos hay mascotas esperando a los dueños, etc.
3. Inteligencia
La inteligencia de los animales es incomparable a la humana. Aunque según algunos test aplicables al hombre un chimpance podría equipararse en inteligencia a un niño de unos 5 años en realidad los test aplicados no sirven de nada:
¿es acaso 100 veces más inteligente una morsa que nosotros porque sabe diferenciar en la penumbra piedras de moluscos? ¿o un mono porque detecta qué ramas son mejores para subir a la copa de árboles que a nosotros nos parecerían inalcanzables?
Simplemente cada ser se adapta a su existencia y a su habitat y la inteligencia se desarrolla de diferente manera según sea o no necesaria. Podríamos entrar en el debate de si entre los propios humanos somos más inteligentes en unos lugares del planeta que en otros donde la comida siempre ha sido siempre más abundante, la vida más sencilla, etc; pero eso lo dejo para otro post, me limitaré a decir que aún no he encontrado por ninguna parte nada que establezca objetivamente que esos animales que nacen en el mar y se transportan en latas de atún, los delfines, sean más inteligentes que el hombre, como alguna vez he tenido que oir.
Por cierto, ésto no es un delfin, pero la foto impacta: